Punto Roma Elástico - Lyon

La tela base es el Punto Roma Elástico - Lyon, una tela de punto compuesta por un 97% de poliéster y un 3% de elastano, con un gramaje de 282 gr/m2 y un ancho de 150 cm. El color liso impreso es un amarillo cadmio intenso, con un porcentaje de tinta cyan del 8, un porcentaje de tinta magenta del 0, un porcentaje de tinta yellow del 88 y un porcentaje de tinta black del 0, dando como resultado un CMYK de 8 0 88 0.

El amarillo de cadmio es un color lleno de energía, que transmite alegría y vitalidad. Se trata de un color secundario que se obtiene mediante la mezcla de diferentes tonos de amarillo y naranja, y que combina perfectamente con otros tonos cálidos, como el rojo y el violeta. A su vez, también puede combinar bien con tonos más fríos, como el verde y el azul, creando un contraste interesante.

Cabe destacar que la tela está impresa con este color liso a una sola cara por impresión digital textil, lo que significa que no se trata de un tejido tintado sino impreso por una sola cara. Además, su textura es suave al tacto.

Respecto a la tela base, sus características generales incluyen una alta elasticidad y resistencia a la deformación, lo que la hace ideal para la creación de prendas de punto como tops, camisetas, pantalones, vestidos y jerseys, tanto para mujeres como para hombres. También puede ser utilizada en la creación de servilletas para el hogar. Se trata de una tela de invierno, que garantiza un buen aislamiento térmico.

En cuanto a los cuidados que debe tenerse en cuenta para este tejido, se recomienda lavar a una temperatura máxima de 30°C, no blanquear, admite limpieza en seco salvo tricloroetileno, planchar a temperatura fría y no se puede secar con secadora.

Finalmente, el tejido se fabrica mediante la tecnología de sublimación con poliéster, lo que permite imprimir imágenes de alta calidad y con una gran definición en tejidos de poliéster. Este proceso de impresión permite trasferir la tinta a la tela mediante la sublimación, que es un proceso en el que la tinta se transforma directamente de sólido a gas sin pasar por el estado líquido, lo que garantiza un acabado uniforme y duradero.