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Los hilos que crean el tejido de sarga se entrelazan de tal manera que permiten que los hilos se muevan libremente, creando una tela que es suave y flexible a la vez que duradera. La Sarga muestra un suave patrón diagonal que le otorga su interesante y característica textura.
Para trenzar la sarga, se emplea una técnica que hace que este tejido tenga una ligera dureza y resistencia, por lo que es idóneo para confeccionar ropa de abrigo –como gabardinas o saharianas-, camisas y también otras prendas como indumentaria de trabajo, mantas o los clásicos kilt propios de la indumentaria masculina escocesa.
La sarga es, además, una tela que aísla resiste levemente el agua, protege muy bien el aire y no se arruga fácilmente. Esta tela de algodón también se emplea en la moda textil hogar, ya que su fuerza y carácter tupido hacen que pueda usarse para tapizar cojines, o para confeccionar manteles y servilletas.
Su composición de100% algodón hace que la sarga resista mejor los lavados que otras sargas con cierto contenido de poliéster, que provoca una tendencia hacia el fenómeno de frisado. Las telas de algodón presentan también una menor afinidad por las grasas y aceites, haciendo que la eliminación de manchas sea más sencilla.