Paño - Glasgow

La tela base de esta descripción es Paño - Glasgow, con una composición del 93% poliéster, 5% viscosa y 2% elastano. Su gramaje es de 380 gr/m2 y su ancho de 150 cm. El color liso impreso es Rojo-Granate, con una mezcla de tinta Cyan (33), Magenta (83), Yellow (51) y Black (42), representado en su CMYK de 33 83 51 42. Este color posee un tono oscuro y se caracteriza por tener una fuerte presencia visual y una interpretación cálida.

Este color posee una gran versatilidad para utilizarse con otros colores. Su combinación con tonos grises, blancos y negros en diseños monocromáticos y minimalistas es frecuentemente utilizada. Otras combinaciones populares incluyen el uso de tonos crujientes, neutros y contrastantes como los naranjas, púrpuras y rosas en diseños estampados.

Es importante destacar que la tela base está impresa con el color liso a una sola cara por impresión digital textil, lo que significa que no es un tejido tintado sino impreso por una sola cara.

En cuanto a sus características generales, la tela base presenta una suavidad táctil que la hace muy agradable al tacto y una calidad elevada que la hace resistente a la abrasión y el desgaste. Además, permite una buena adaptabilidad en la confección, así como una fácil manipulación y costura. Por otro lado, sus aplicaciones cubren diferentes categorías desde moda, textil hogar hasta otros, como telas para altares. Algunos ejemplos de su uso puede ser para la confección de abrigos, blazers o chaquetas, a cojines o posavasos.

Merece destacar los cuidados que debe tener este tejido para evitar cualquier tipo de daño irreversible. Este tejido no es apto para el blanqueado, ni el secado en secadora. Deberá ser lavado a temperatura máxima de 40ºC y planchado a temperatura tibia. La prenda no admite lavado en seco y se recomienda no usar lejía ni secadora para conservarla por más tiempo.

Para finalizar, la tecnología de impresión utilizada en la fabricación de este tejido es la sublimación (poliéster). Este proceso de impresión consiste en la transferencia de tinta de una superficie sólida a un estado gaseoso y, posteriormente, su deposición en un tejido con poliéster. Este proceso resulta en una impresión de alta calidad y resolución, con una duración y fidelidad de color excelentes.