Crepe de Punto Elástico - Riga

La tela base es el Crepe de Punto Elástico - Riga, con una composición del 94% poliéster y un 6% de elastano, un gramaje de 180gr/m2 y un ancho de 150cm. El color liso impreso es el amarillo mimosa, con un CMYK de 6 26 72 0. Este color simboliza la energía, la felicidad y la alegría. Técnicamente hablando, el color amarillo mimosa es un color secundario que se crea mezclando los colores primarios magenta y amarillo. Se combina muy bien con otros tonos cálidos como naranja y rosa, y también con tonos fríos como el verde y el azul.

Es importante destacar que la tela está impresa con el color liso a una sola cara por impresión digital textil, lo que significa que no es un tejido tintado sino impreso por una sola cara. La tela es elástica y tiene un tacto granulado, lo que la hace adecuada para prendas ajustadas al cuerpo. Además, la tela es atemporal, lo que significa que es perfecta para cualquier temporada del año. En cuanto al color liso impreso, el amarillo mimosa le aporta un toque vibrante y juvenil a cualquier diseño.

En cuanto a las aplicaciones y usos de la tela base, es adecuada para la confección de prendas tanto para mujer como para hombre, como vestidos, monos, camisetas, tops, faldas, pantalones, cardigans y prendas de punto. Su elasticidad permite que se ajuste cómodamente al cuerpo, lo que la hace adecuada para diversas prendas.

Es imprescindible tener en cuenta los cuidados de la tela, siendo que no se debe blanquear, que la temperatura máxima de lavado es de 40ºC, que admite limpieza en seco salvo tricloroetileno, que se debe planchar a temperatura fría y que se puede secar con secadora a temperatura reducida. Siguiendo estas instrucciones, se asegura la durabilidad y calidad de la prenda.

Por último, la tecnología de impresión con la que se fabrica este tejido es la sublimación (poliéster). Este proceso de impresión digital textil se lleva a cabo mediante la transferencia del diseño impreso en papel a la tela, utilizando una prensa térmica. La tinta se convierte en gas y, a través del calor y la presión, se une con la fibra de la tela. El resultado final es una prenda de alta calidad y durabilidad.