Raso - Ámsterdam

El Raso - Ámsterdam es un tejido de tipo satén/raso compuesto por 100% poliéster, con un gramaje de 120 gr/m2 y un ancho de 150 cm. Su cuidado debe ser a temperatura máxima de 40ºC y no se debe blanquear. Este tejido es perfecto para su uso en moda como camisas, blusas, faldas, monos, pantalones, tops, pañuelos y lencería como pijamas, vestidos y novias. También se puede utilizar en otros productos como kimonos y accesorios.

El color impreso es un hermoso gris con un toque de plata metálica, como lo indica el CMYK (22 12 15 0). Este color combina perfectamente con otros tonos plateados y grises, creando una sensación moderna y elegante. La tela está impresa con el color liso a una sola cara mediante impresión digital textil. La textura de la tela es visualmente brillante, lisa y delgada, que en combinación con el color impreso crea una apariencia sofisticada.

Entre las características generales de la tela base, destacando su composición de poliéster que lo hace resistente, duradero y fácil de cuidar. Además, su suavidad y brillo lo convierten en un tejido versátil e ideal para prendas en las que se quiera lucir impecable. En cuanto al color impreso, su brillantez y plata metálica aportan un toque elegante y moderno a cualquier proyecto en el que se utilice.

La tela base del Raso - Ámsterdam es perfecta para una amplia variedad de aplicaciones, como es el caso de: moda, lencería, kimonos y accesorios. La impresión del color liso le da un toque especial y moderno, por lo que es ideal para prendas que busquen un toque de originalidad y sofisticación.

Es importante tener en cuenta los cuidados necesarios para mantener las propiedades de la tela. En este caso, no se debe blanquear y la temperatura máxima de lavado es de 40ºC. Además, se puede secar en secadora a temperatura reducida y se puede planchar a temperatura tibia. También admite limpieza en seco, excepto con tricloroetileno.

La tecnología de impresión utilizada en este tejido es sublimación (poliéster), lo que permite la transferencia del color impreso desde una hoja de papel a la tela, mediante un proceso de calor presión. Este proceso logra la fijación permanente del color al tejido sin sacrificar su suavidad y brillo.