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Material: | 93% Poliéster, 5% Viscosa, 2% Elastano |
Ancho (cm): | 150 |
Gramaje (g/m²): | 380 |
Características: | Suave |
Aplicación / Uso: | Telas para Altares, Abrigos / Trench, Posavasos, Cazadoras / Chalecos, Blazers |
Método de Fabricación: | Impresión Digital Textil a una cara, todos los productos se fabrican de forma personalizada bajo pedido. |
Cuidados: |
La tela base es el Paño Glasgow, compuesta de un 93% de poliéster, un 5% de viscosa y un 2% de elastano, con un gramaje de 380 gr/m2 y un ancho de 150 cm. El color liso impreso es un Azul Lapislázuli, cuyo CMYK es de 99 73 30 15. Este color se caracteriza por ser un tono oscuro y profundo, que transmite una sensación de elegancia y sofisticación. Además, se trata de un color muy versátil que combina especialmente bien con tonalidades cálidas, como el marrón, el beige o el dorado.
Es importante destacar que este tejido está impreso a una sola cara por impresión digital textil, por lo que el color impreso se encuentra exclusivamente en una de las caras del tejido. En cuanto a las características generales de la tela base, destacan su suavidad al tacto y su resistencia. En cuanto al color impreso, se trata de un color vibrante y con una excelente definición de los detalles.
Respecto a las aplicaciones y usos de este tejido, es ideal para la confección de abrigos, chaquetas y cazadoras para ambos sexos, así como blazers y trenchs. También es utilizado para la confección de posavasos en el comedor y paños de cocina gracias a su resistencia y facilidad de lavado. En tejidos para altares también es una opción adecuada.
Es fundamental tener en cuenta los cuidados que requiere esta tela para su correcto mantenimiento. No debe ser blanqueada ni lavada en seco, mientras que el planchado debe ser a temperatura tibia y no se recomienda el secado en secadora.
Finalmente, la tecnología de impresión utilizada en este tejido es la sublimación, técnica que permite reproducir con gran fidelidad los diseños y los colores elegidos. Consiste en imprimir el diseño sobre un papel, que después se coloca sobre la superficie de la tela, y se somete a una alta temperatura y presión, provocando que la tinta se sublimine directamente a la fibra del tejido, creando así una impresión permanente.